Entre RÃos
Aspiramos ser primer mundo; alentamos el regreso de trenes y barcos a la Argentina
VILLA ELISA
20-12-2011
ANTES LOS LINYERAS, AHORA EL CORTA PASTO QUE ANDA SOLO POR LAS VÃAS ENTRERRIANAS. LA INCREIBLE TAREA DE JORGE PUSCH
Cuando a las vÃas el pasto las fue tapando, uno de los “oficios†terminales o marginales o quizás de extrema libertad, comenzó a extinguirse de Argentina. Con 50 mil kilómetros de rieles y trenes de carga con vagones abiertos, el oficio de linyera se hizo común y mas aun verlos pasar con sus bartulos o solo una caña al hombro que en su extremo sostenÃa vaya a saber que elementos para su vida diaria. Eran solitarios personajes salidos de novelas de una vida que se resistÃan a vivir como se imponÃa en la “normalidadâ€. Los linyeras rompieron las reglas, hicieron de la vÃa su camino, de los puentes su techo y del caminar su transito al estilo elegido. Nunca tuvieron homenaje ni mención especial, pero a pesar de eso, la memoria nunca dejó de recordarlos como los únicos dueños de su mundo, y en verdad se extraña su extinción.
En 2011, los pastos y malezas de las vÃas entrerrianas son cegados por un hombre que como los linyeras transita solo por la vÃa con su tractor sin cabina y una desmalezadora que lo sigue. Su condición de solitario en medio de la nada, porque el tren pasa muy de vez en cuando y su optimismo por saber que en cada puente donde su tractor pasa haciendo equilibrio, la mano de Dios lo esta ayudando a cruzar, porque no tiene a nadie a su lado que le de una mano para al menos alentarlo. Este increÃble, optimista y tozudo hombre que nunca fue ferroviario es un hallazgo de proezas diarias nunca reconocidas. Pasó por Villa Elisa, luego de haber venido solo por la calle !!en tractor desde Paraná ¡¡¡ y también solo desde Caseros hasta Barú haciendo su tarea. Tiene ganas de dejar la actividad “para estar un tiempo con mi familia en mi casa de Vialeâ€, comentaba mientras arreglaba una destruida cuchilla en la estación de Villa Elisa. Su trabajo se parece mucho al del linyera por la soledad que lo acompaña y porque en la vÃa nadie pasa para auxiliar a nadie. A realizado este trabajo en todos los ramales que se van habilitando y cuando salió de Elisa siguió con su tarea hasta su destino en Paraná. La historia del ferrocarril esta escrita por anónimos personajes que dejan su vida y su familia para cumplir su misión y al igual que los linyeras, nunca fueron reconocidos, solo el recuerdo los rescata………..Nuestro destacado hombre entrerriano de las vÃas empastadas se llama Jorge Pusch y vive en la ciudad de Viale.