BALNEARIO ROCHA
15-02-2023

A seis años de la inundación mas grande del Rocha.

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(Villa Elisa al Dia) La autobomba en Balneario Rocha el domingo 12 de febrero de 2017.

2023-02-15-Hora 9:18
La crónica decía:
“Cientos de personas que se convocaron este fin de semana para asistir a un motoencuentro en el balneario Rocha, de Villa Elisa, fueron sorprendidos por una lluvia fuera de lo común, estimada en alrededor de 300 milímetros.”

La fiesta y entretenimiento se volvió una pesadilla.

Las intensas lluvias registradas este sábado 11 y domingo 12 caídos en pocas horas- hicieron que el arroyo, habitualmente muy tranquilo y de poco caudal, creciera intempestivamente, arrastrando todo a su paso.

A la madrugada del domingo 12, el agua sorprendió a quienes dormian en las carpas, que no entendian lo que estaba ocurriendo. La lluvia intensa y constante caida en Villa Elisa, se dirigió a su cauce natural, desaguando en el arroyo Perucho Verne, sin que nadie imaginara la magnitud del suceso. Alli, se dieron cuenta del peligro y riesgo de vida que corria la gente que habia quedado esa noche, porque el motoencuentro continuaba ese dia.

Los Bomberos Voluntarios de Villa Elisa inmediatamente se acercaron al lugar para asistir a los damnificados, pero el agua arrastró el camión en el que llegaron.

Era tanta la intensidad de la corriente de agua que venia desde el oeste, que el arroyo manso, era un río torrentoso, que empujó a la autobomba que intentaba llegar al otro lado, inclinandola hacia la izquierda, colocándola al borde de la calzada y a punto de dar una vuelta de campana.

Esa foto es la que mas recuerda el inesperado suceso, que dejo bajo los cuatro metros de crecida, motos, freezer, carpas, equipos de sonido, autos y otras cosas que flotaban y que nunca pudieron recuperarse.

Si bien se conocía el daño que producían las lluvias grandes, nunca se había reportado ni se recuerda una de tal magnitud. Cuando al final de la década de 1970, se construyó la cantina, se tomó en cuenta las históricas inundaciones, relatadas por pobladores de la zona. Por ello, se escogió ese lugar, con un levante considerable sobre el nivel normal, considerando que el agua, no debería llegar allí.
No solo que llegó, supero en más de un metro el nivel del piso de la cantina, anegándola totalmente.

Lo de “alrededor” de 300 milímetros es literal. No hay precisión de la lluvia caída, porque los pluviómetros colapsaron, y se estableció un promedio, aunque no se descarta, por su magnitud, que el registro final supere largamente la cifra estimada.

Ese fin de semana de febrero de 2017, fue el último motoencuentro realizado allí. Dos años después, se instalo la alarma de evacuación, que hace escuchar su sonido ante el comienzo de una lluvia.