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Ferroclub Central Entrerriano
PACHECO-BENAVIDES-BUENOS AIRES.
01-02-2023
La peor tragedia ferroviaria de la Argentina: un tren a 100 km por hora, 236 muertos y la beba del milagro. Un tren local detenido y una via libre mal dada.
2023-02-01-Hora 9:13
El 1掳 de febrero de 1970 el tren que iba desde Zarate a Retiro fue embestido por otra formaci贸n. Los estremecedores testimonios de los sobrevivientes, las mentiras del dictador Ongan铆a y la historia de la ni帽a de un a帽o y medio que salv贸 su vida en medio de ese infierno por un hecho fortuito.
El peor accidente ferroviario de Argentina, ocurri贸 porque un tren local se rompio entre dos estaciones. El larga distancia que venia atras se encontro con la via libre otorgada por error del auxiliar en la estaci贸n Benavides, que no habia recibido la llegada del primero a la estacion siguiente-Pacheco-, por lo que inmediatamente de la partida del tren local, debio subir la se帽al y colocar la luz roja, sabiendo que el larga distancia venia atrasado y a mucha velocidad. Tambien, en menor medida, la omision de guarda y maquinistas del tren local de activar las bengalas de emergencia y avisar por telegrafo de la detenci贸n. Sumado a esto, era de noche.
鈥淎 m铆 me encontr贸 una persona que, pese a que hab铆an pasado algunas horas, segu铆a buscando sobrevivientes. Yo estaba atrapada debajo de un asiento del tren, en una zanja, y fui una de las 煤ltimas en salir con vida. Cuando me pude parar y mirar bien lo que hab铆a ocurrido, fue como ver una pel铆cula de terror鈥, recordar铆a medio siglo despu茅s Viviana Malarino la noche imborrable en que un d铆a de paseo con sus t铆os se transform贸 en una pesadilla de la que sali贸 con un traumatismo de cr谩neo y las fracturas de un f茅mur y la pelvis.
Esa noche, la del 1掳 de febrero de 1970, Viviana ten铆a cuatro a帽os y tambi茅n 鈥損ese a las heridas鈥 tuvo mucha suerte. Fue una de las sobrevivientes de la mayor tragedia ferroviaria de la historia argentina: el choque de dos trenes donde murieron 236 personas y quedaron heridas m谩s de cuatrocientas.
Ese primer d铆a de febrero cay贸 en domingo y tambi茅n hizo mucho calor. La temperatura segu铆a alta a primera hora de la noche y azotaba a los 1.090 pasajeros que llevaba 鈥淓l Zarate帽o鈥, como se conoc铆a al tren del Ferrocarril Mitre que hab铆a salido a las 18.48 de Z谩rate con destino a Retiro. La mayor铆a volv铆a a Buenos Aires despu茅s de un d铆a de paseo.
El calor aument贸 cuando a las 20.02 el tren se detuvo en el kil贸metro 36, entre las estaciones Benav铆dez y General Pacheco, por un desperfecto en la locomotora.
Y entonces, a las 20.05, el calor se transform贸 en infierno. Detr谩s de 鈥淓l Zarate帽o鈥 detenido apareci贸 corriendo por las v铆as a m谩s de cien kil贸metros por hora 鈥淓l Mixto鈥, proveniente de Tucum谩n con 260 pasajeros en sus vagones, y lo embisti贸.
鈥淓l Zarate帽o鈥, que iba hacia Retiro, llevaba 1090 pasajeros. El tren que ven铆a desde Tucum谩n lo impact贸 a 100 kil贸metros por hora cuando estaba detenido
A Jaime Pina, un chico de 16 a帽os que viajaba en 鈥淓l Zarate帽o鈥, lo salv贸 el calor. 鈥淰iajaba con tres amigos en la plataforma del vag贸n, porque era el 煤nico lugar donde corr铆a un poco de fresco y es posible que este hecho me haya salvado la vida. No hac铆a m谩s de tres minutos o cuatro que est谩bamos detenidos cuando empezamos a escuchar gritos que ven铆an desde los vagones traseros del tren y al asomarnos vimos que mucha gente se tiraba y trataba de alejarse corriendo. Cuando 铆bamos a bajar para averiguar lo que pasaba fuimos pr谩cticamente lanzados primero contra los costados de la plataforma y luego sobre las v铆as y desde all铆 a un ca帽averal donde estuve un rato sin saber qu茅 hacer. Sobre el terrapl茅n no se ve铆a nada, ya que una nube de polvo lo cubr铆a todo. Al salir del ca帽averal en busca de mis amigos vi cerca de las v铆as varios cuerpos mutilados y a una chica que corr铆a de un lugar a otro y ped铆a que la ayudaran a buscar a sus padres鈥, le cont贸 esa misma noche a un cronista de La Prensa. Ten铆a fracturas en el tobillo derecho, cortes y hematomas.
El choque
鈥淓l Mixto鈥, con ocho vagones de pasajeros y dos de transporte de autos tirados por dos locomotoras, ven铆a atr谩s de 鈥淓l Zarate帽o鈥 porque llevaba 48 minutos de atraso. Seg煤n el cronograma ferroviario, debi贸 haber pasado por Zarate antes de la partida del tren local, pero se le hab铆a hecho tarde.
Al pasar la estaci贸n Benavidez, los maquinistas Alfredo Amoroso y Juan Diozkez vieron la se帽al de 鈥渧铆a libre鈥 y condujeron a toda potencia las dos locomotoras para recuperar algo de tiempo. Supusieron que 鈥淓l Zarate帽o鈥 hab铆a sido desviado a una v铆a auxiliar para dejarlos pasar.
Nunca imaginaron que el tren local estaba detenido por un desperfecto luego de una peque帽a curva cerca del arroyo Las Tunas.
Cuatro de los vagones del "Mixto", el tren que ven铆a desde Tucum谩n, descarrillaron. Pero la peor parte la llevaron los tres 煤ltimos vagones de "El Zarate帽o"
Cuando lo vieron y trataron de frenar, ya era tarde. Las dos locomotoras del tren de Tucum谩n se incrustaron en dos de los 煤ltimos vagones del tren que se encontraba detenido, y lo destrozaron, el resto del tren local sali贸 disparado a ra铆z del impacto y se detuvo a 80 metros. Tambi茅n descarrilaron cuatro vagones de 鈥淓l Mixto鈥.
鈥淒esde la estaci贸n Benavidez hasta el lugar del choque habr谩n transcurrido dos minutos escasos, porque llevaba una velocidad cercana a los 105 kil贸metros por hora. Al dejar atr谩s la curva, alcanc茅 a ver un tren que se me antoj贸, enseguida, corr铆a por mi propia v铆a. Apliqu茅 entonces los frenos unos 350 metros antes del choque, y alcanc茅 a reducir la velocidad a casi la mitad de la que ven铆a. Igual el impacto fue terrible鈥, declar贸 Alfredo Amoroso, que conduc铆a la primera locomotora de 鈥淓l Mixto鈥.
Vito Ceroli, conductor de la locomotora de 鈥淓l Zarate帽o鈥 estaba arrodillado dentro de la m谩quina para arreglar un problema mec谩nico y el golpe lo sorprendi贸. 鈥淓n el primer momento presum铆 que se trataba de un fuerte tir贸n de la m谩quina reparada. Nunca pens茅 que hab铆amos sido embestidos por otro tren. Como estaba arrodillado, el golpe tir贸 hacia adelante y me golpe茅 la cabeza contra el tablero de mando de la locomotora. Por suerte no perd铆 el conocimiento y pude ayudar a algunos pasajeros heridos鈥, relat贸.
Lo hizo durante unos minutos, hasta que se dio cuenta de que estaban en una zona donde ni siquiera hab铆a una casa y que nadie sab铆a lo que hab铆a pasado. 鈥淓ntonces le ped铆 al foguista que separara la m谩quina del resto del tren y sal铆 con la locomotora hacia la estaci贸n General Pacheco para pedir ayuda鈥, explic贸.
El rescate
Poco despu茅s del choque comenz贸 a llover con furia. Los veh铆culos de los bomberos y la polic铆a, las ambulancias e incluso camionetas particulares deb铆an atravesar campos anegados desde la vieja Ruta 9 hasta las v铆as del ferrocarril para poder evacuar a los heridos.
Pronto se hizo imposible y se pidi贸 la colaboraci贸n de varios tractores de la Municipalidad de General Pacheco y de los bomberos para poder arrastrar las ambulancias y las autobombas.
La ma帽ana del 2 de febrero las instalaciones del Hospital de San Fernando estaban colmadas de heridos, mientras que los cuerpos de las v铆ctimas fatales se repart铆an entre la subcomisar铆a de General Pacheco y el cuartel de los bomberos de la ciudad.
Una zorra del ferrocarril se sum贸 al traslado de los cad谩veres. 鈥淵o viv铆a en la estaci贸n, la zorra tra铆a los muertos y los depositaba en la puerta de la que era mi casa鈥, record贸 hace unos a帽os para la web de General Pacheco M贸nica Appendino, hija de un empleado del ferrocarril.
Alfredo Amoroso, el conductor del "Mixto", reci茅n aplic贸 los frenos unos 350 metros antes del choque. El impacto fue terrible
Los rescatistas continuaban buscando muertos y heridos entre los hierros retorcidos de los vagones y a煤n se o铆an gritos pidiendo auxilio o de dolor.
Los muertos contados a la noche sumaban 145, para media ma帽ana ya superaban los doscientos. La suma total ser铆a de 236.
Finalmente, acudieron trabajadores del ferrocarril para retirar los restos de los vagones y locomotoras. Los dos vagones que se hab铆an pr谩cticamente 鈥減egado鈥 por el choque fueron arrojados a una zanja paralela a las v铆as, para cortarlos con sopletes y transportarlos.
Una se帽al olvidada
La investigaci贸n no demor贸 en determinar las causas del tremendo choque de trenes. Al principio se pens贸 en un sabotaje, pero pronto se supo la verdad.
Todo apuntaba a la negligencia del personal de la estaci贸n de Benavidez: alguien hab铆a colocado la se帽al de 鈥渧铆a libre鈥 para que avanzarfa el tren local y despu茅s hab铆a olvidado volver a ponerla en posici贸n horizontal para avisar al siguiente tren que deb铆a detenerse.
Por eso, creyendo tener 鈥渧铆a libre鈥, los maquinistas del tren que ven铆a atrasado desde Tucum谩n hab铆an acelerado hasta superar los cien kil贸metros por hora.
Como responsable principal de la tragedia se se帽al贸 a M谩ximo Blanco, de 37 a帽os, el auxiliar de la estaci贸n que estaba a cargo de las se帽ales.
Seg煤n declaraciones de testigos, a las 20.04, cuando el tren de Tucum谩n pas贸 por la estaci贸n, 鈥淏lanco sali贸 corriendo del ba帽o y corri贸 a la casilla gesticulando y tom谩ndose la cabeza al mismo tiempo que gritaba preguntando al pe贸n si hab铆a tenido confirmaci贸n de General Pacheco de la llegada del primero de los trenes, a lo que el pe贸n contest贸 que no (...) En ese momento tuvimos el presentimiento de que una terrible tragedia iba a ocurrir鈥, fue uno de los testimonios que qued贸 asentado.
El 3 de febrero fue declarado 鈥淒铆a de duelo nacional鈥 y el matutino Cr贸nica informaba en la tapa el n煤mero definitivo de v铆ctimas: 鈥淐ruel saldo: 236 muertos鈥, dec铆a con inevitable letra tama帽o cat谩strofe.
Dos d铆as despu茅s del terrible accidente fue declarado Duelo Nacional
Conducta de un dictador
El pa铆s viv铆a bajo la dictadura de la autodenominada 鈥淩evoluci贸n Argentina鈥 y en el sill贸n presidencial estaba apoltronado el general retirado del Arma de Caballer铆a Juan Carlos Ongan铆a.
El 2 de febrero, rodeado de custodios y asesores, el dictador visit贸 el lugar de la tragedia y recorri贸 hospitales, donde dialog贸 con algunos heridos, a quienes hizo m谩s de una promesa. No s贸lo que el hecho ser铆a esclarecido, sino que ser铆an indemnizados por el da帽o causado a las familias de las v铆ctimas fatales y a los propios heridos.
鈥淰ino mucha gente, incluso el Presidente, el cual me dijo que me iba a pagar por lo que padec铆. Los pol铆ticos me prometieron de todo, pero la 煤nica que me ayud贸 fue la gente, que tra铆a donaciones鈥, record贸 hace tres a帽os Viviana Malarino.
Ongan铆a tambi茅n aprovech贸 la tragedia para justificar una medida que hac铆a tiempo quer铆a tomar, aunque no encontraba la excusa: clausurar la revista As铆, que dirig铆a H茅ctor Ricardo Garc铆a.
En 1970, As铆 se publicaba los martes y los viernes. Como era caracter铆stico de los medios de Garc铆a, la revista envi贸 cronistas y fot贸grafos para hacer una amplia cobertura, con gran despliegue de fotos.
Seg煤n consign贸 "As铆", muchas de las v铆ctimas murieron desangradas en medio del campo por la dificultad del acceso de m茅dicos y ambulancias a la zona del impacto
El martes 3 a la ma帽ana, As铆 lleg贸 a los kioscos con sus p谩ginas dedicadas casi exclusivamente al choque de trenes. Las fotos reflejaban cabalmente el horror de lo ocurrido.
Con la excusa de que esas im谩genes perturbaban a la sociedad, el dictador orden贸 levantar la revista de los kioscos y decret贸 su clausura.
El milagro de Heidi
Heidi Henika era una nena de un a帽o y medio el 1掳 de febrero de 1970, cuando luego de pasar un d铆a en la casa de sus t铆os, en Ingeniero Maschwitz, abord贸 con sus padres Juan y Karin, los dos alemanes, 鈥淓l Zarate帽o鈥 para viajar hasta Retiro y despu茅s volver a la casa familiar, en Quilmes.
Hasta 2020 nunca habl贸 p煤blicamente del accidente, pero ese a帽o accedi贸 a contar la historia familiar de ese d铆a a La Opini贸n Austral, un diario de R铆o Gallegos, la ciudad donde viv铆a desde hac铆a m谩s de veinte a帽os. Aclar贸 que ella no ten铆a recuerdos propios, porque era muy chiquita, pero que su padre le relat贸 m谩s de una vez lo que les pas贸 ese domingo tr谩gico.
En el choque murieron 236 personas. Fue la peor tragedia ferroviaria de la historia argentina. El dictador Ongan铆a ejerci贸 la censura contra la revista As铆 y aprovech贸 la crudeza de las im谩genes que public贸 para cerrarla, algo que deseaba hac铆a tiempo
鈥淣osotros 铆bamos en el tercer vag贸n, la formaci贸n queda parada y al tiempo, no s茅 cu谩nto, escuchan otro tren. Ven铆a de Tucum谩n y se llev贸 puesto al nuestro. Levanta el primer vag贸n, arrastra el segundo y cae encima del tercero鈥, relat贸.
Y despu茅s cont贸 c贸mo un hecho fortuito le hab铆a salvado milagrosamente la vida. 鈥淵o iba con mi mam谩, pero unos minutos antes del accidente no s茅 qu茅 ped铆 y qued茅 sentada entre las piernas de mi pap谩. Yo solo tuve un rasp贸n, pero mi pap谩 se quebr贸 la tibia y el peron茅. Tuvo una fractura expuesta, que en ese momento no vio por la oscuridad, pero si sinti贸 que estaba atrapado. Mi mam谩 muri贸 y si yo me hubiera quedado sentada con ella seguramente habr铆a muerto tambi茅n鈥.
Ese domingo, Heidi sabe que vivi贸 un milagro, pero tambi茅n una tragedia que la marc贸 por el resto de su vida.
Lo dice as铆: 鈥淒esde que tengo recuerdo siempre fui la hija del accidente鈥.
Daniel Cechini- Infobae
