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VILLA ELISA
21-10-2016
El Tiro; un barrio de casas de madera y romances de pasillo.
2016-10-21-0:03
Se concreto anoche un encuentro mas del Ciclo de Extensión Cultural y Educativa del Concejo Deliberante de Villa Elisa.
El Tiro; un barrio de casas de madera y romances de pasillo.
En las charlas organizadas por el Concejo Deliberante de Villa Elisa, llego la noche de hablar del Tiro. Un barrio que comenzó según Carlos Putallaz, ex intendente y ahora recopilador de historias de la ciudad, por los años 40, en una propiedad que dono Héctor de Elía para el Tiro Federal de la ciudad, que iba desde la pileta municipal, hasta la cancha de tenis del Club Progreso actual en una franja de 100 metros.
Según la misma fuente, para evitar su embargo, cuando las finanzas del fundador sucumbieron, se lo traslado a su amigo José Moix, quien nunca se hizo cargo del lugar, por lo que el mismo quedo despoblado hasta que comenzó el barrio.
Vivian en 1970, unas 300 personas, contabilizadas en un censo municipal, con la idea de ordenarlo, cuestión que se estudio, pero que finalmente se opto por erradicarlo, mudando a las familias y personas a una casa propia, distribuidas en varias zonas de la ciudad en 1981.
La cuestión más relevante, de la charla- con la mayor concurrencia de personas-, muchos de ellos habitantes o hijos de familias del barrio, de este ciclo de encuentros, fue cuando aparecieron los testimonios, la mayoría anécdotas desconocidas, como la que narro un señor mayor, a quien su padre, le había contado que en ocasión del Centenario del país en 1910, uno de los festejos se hizo en El Tiro, destacando que el con sus 20 años había visto rodar toneles de vino por la calle hacia “El Tiro” para la fiesta.
La historia del romance inconcluso.
La otra historia que mereció la atención de todos, la conto el periodista Carlos Acosta, que no habito el barrio, pero si su mama que vivió un tiempo ahí, y ella con su trabajo le costeaba los estudios.
En una fugaz visita que le realiza a su madre, cuenta Acosta, entablo una conversación con una chica que no recuerda su nombre, en un pasillo del barrio, tratando de conquistarla, cosa que queda establecida para la próxima vez que venga. La anécdota del comunicador, pretendía poner de relevancia, que en el barrio El Tiro, también había tiempo para la recreación, y se establecían relaciones entre jóvenes.
El silencio con que el publico escuchaba el relato, devino en sorpresa, cuando una mujer sentada a pocos metros, levanto la mano y dijo, “esa mujer que vos hablas, soy yo”.
Las risas y la sorpresa inundaron el salón del Concejo, por lo que el periodista sacudido por la revelación, no pudo contener su risa ante tan inesperada y festejada situación.
Jorge Joannaz al comienzo y al final.
Como participante espontaneo de cada reunión social, Jorge Joannaz, comenzó la noche cantando un tema compuesto por si hermano “Piojo”, a un habitante del Tiro, Catalino Barrios, apodado Cacho Duarte, y al final, otro tema de su intelecto, dedicado a los 100 años del Circulo Obrero, donde nombra a varios elisenses que no pasaron desapercibidos en su estadía por Villa Elisa, evocándolos de manera póstuma.
En definitiva fue una noche de recuerdos de un lugar que trae nostalgia, y como decía el relator, una manera de hacernos la autocritica de nuestra visión de ciudadanos del centro hacia “los del tiro” como despectivamente se los denominaba a sus habitantes, un poco en broma y otro poco en serio.
Al desaparecer hace mas de 35 años, “El Tiro”, solo se reduce a recuerdos de desalineadas casitas de colores, familias que se formaron, historias de amor y donde, curiosamente, no hay una foto que certifique su existencia, una calle que lo nombre, ni un monolito que lo rememore.
